LOS TELOS

Hoy pase, como todos los dias cuando vuelvo del estudio, por la puerta de un telo.
Cuando me ocurrio esto que voy a contar no era ese telo, este donde me paso queda en Belgrano, yo paso por Chacarita para irme a casa.
Pero siempre me quedo la sensación de aprension, de incomodidad cuando paso por la puerta de uno.
Estaba con un chico con el que salia, Mariano, que tenia un auto muy identificable, un Renault 19 violeta.
Saliamos del telo, con la cara de circunstancia del caso, tanto él como yo. Seria 4 y media, 5 de la matina de un domingo, o sea sabado a la noche.
Estabamos los dos tan cansados que ya no veiamos.
Me pidio que me fijara si venia alguien de mi lado para agarrar la calle, y le dije cuando pase este auto, arranca.
El auto estaba sobre la vereda, a la salida del estacionamiento del telo. Mas buchon imposible.
En eso veo que el auto se para y nos toca bocina.
La mama de Mariano, con el marido.
Nos estaban saludando.
Yo no atine ni siquiera a esconderme. Para colmo esa noche teniamos una cena con ella.
Nos saludo y se fueron.
Yo llego a la casa esa noche y no podia mirar a Silvia a la cara. Me daba demasiada vergüenza.
En un momento me agarro Silvia en la cocina y me pidio disculpas por la noche anterior.
Pero el daño ya estaba hecho.
Desde ese momento cada vez que salgo de un telo, miro tanto a todos lados que parece que estuviera de trampa. Aunque este sola.